sábado, abril 26, 2008

Plaf

.....Era una de esas noches de calor en las cuales la piel parece un adhesivo húmedo al que se pegan las piernas de María y las sábanas y los pelos del gato.
.....Martín se levantó suavemente, procurando no despertarla. Estaba en calzoncillos. Abrió la ventana de par en par y recibió en su rostro el mundo y su noche. Puso un pie sobre la barandilla de hierro. Saltó. Cayó dos pisos. Cayó sobre las avenidas y sobre las sendas peatonales. Cayó sin motivos sobre los balcones. Cayó seis pisos, sobre todas las plazas. Sobre la cuesta que desciende de la Biblioteca Nacional, donde jugaba cuando era chico. Cayó diez pisos. Cayó sobre sus calles favoritas. Sobre el patio de Rube. Cerró los ojos. María, pegada a su piel, todavía respiraba su perfume de cigarrillo, dentífrico y galletita antes de dormir; y las sábanas y los pelos del gato.

domingo, abril 20, 2008

Mandarinas

Estaban tirados en el bollo de sábanas cuando Rube le dijo: Quisiera ser el tipo sexy que te encanta.

-¿Cuál?
-Ese, no sé. Todas tienen uno.

Susi lo miró con ternura. Entonces, le acarició el pelo negro que se hizo gajos entre sus dedos. Gajos brillantes de un pelo que parecía estar húmedo. Sos un tonto, le dijo.

jueves, abril 10, 2008

Sobre Strindberg y mamá

- Mirá. ¿Te puedo leer algo?
- ¿Qué es?
- Algo que escribió Strindberg. Escuchá: "No ser dueño de nada es una manera de ser libre".
- Sí. Qué se yo.
- ¿No te parece?
- No, no. Estoy de acuerdo con...
- Strindberg.
- Strindberg, si. Puede ser.
- ¿Ves? Yo nunca fui dueña de nada.
- No seas dramática. Esa almohada es tuya, por ejemplo.
- Si, pero una almohada no esclaviza.
- Polidor es tuyo.
- ¿Polidor es mío?
- Supongo. Vos lo encontraste, lo trajiste y le das agua.
- Si, ¿no?.

(María sostiene el libro. Dormido sobre su falda, mastica uno de sus dedos.).

- Todo esto me hizo pensar en mamá. (mirando a Polidor).
- ¿Ella también le andaba leyendo frases de Strindberg a la gente? (con ironía).
- No, pelotudo.